Defensa de la Utilidad del Bachillerato de Humanidades

¿Por qué las Humanidades (Letras) triunfan en el s. XXI?

Francisco Huertas Hernández & Inmaculada Arriero Doblado

«Háblame, Musa, del varón de gran ingenio, que anduvo errante muchísimo tiempo, después de que destruyó la sagrada ciudad de Troya; y que vio las ciudades de muchos hombres y conoció su manera de pensar, pero padeció aún en el mar muchos dolores en su ánimo, procurando conservar su vida y el regreso de sus compañeros. Mas ni siquiera así terminó de salvar a sus compañeros, aunque lo deseaba vivamente, pues perecerieron por sus propios actos temerarios» Homero:»Odisea». Canto I

Odiseo (conocido en español como Ulises) es el héroe del poema épico de Homero»La Odisea». Ésta fue la primera novela de aventuras de la historia, y en su comienzo encontramos las características del triunfador: ingenio, dificultades, lucha y triunfo. Sobrevive a sus compañeros de navegación. Así, vosotros, los que vais a estudiar Bachillerato de Humanidades seréis también héroes y, por tanto, triunfadores. Como Odiseo habréis de enfrentaros a una navegación arriesgada ya que muchas sirenas (Departamentos de Orientación, profesores, ministros, empresarios, prejuicios sociales) y monstruos (falsas ideas que hablan de paro) intentarán apartaros de vuestro camino.
Vamos a enumerar algunas de esas ventajas en el mundo del siglo XXI:

a) El Bachillerato de Humanidades es el bachillerato de la Oratoria, ese arte/técnica de hablar en público con elocuencia (fluidez, propiedad, convicción) que persuade, convence y conmueve al oyente. ¿Dónde si no formarse para triunfar en todas las actividades de la vida en las que nuestro éxito depende de nuestras palabras: ventas, negocios, juicios, enseñanza, política, mediación…? Por esto solo ya valdría hacer Humanidades. Carreras como: Periodismo, Derecho, Publicidad y Relaciones Públicas, Gestión y Administración Pública, Información y Documentación, Relaciones Internacionales, Ciencias Políticas, Criminología, Educación Infantil y Primaria, Turismo, Pedagogía, Sociología, Filosofía, Antropología, Filologías, Traducción e Interpretación, Historia, Historia del Arte, y otras necesitan del dominio de la palabra (precisión, capacidad de análisis, interpretación, imaginación) que proporciona este Bachillerato.
Las entrevistas de trabajo, la relación con alumnos, clientes o pacientes, la relación de ayuda, todo ello necesita de este arte de la palabra que se adquiere leyendo, traduciendo, exponiendo oralmente, dialogando, conociendo la etimología, interpretando mitos, estableciendo conexiones de conceptos y vivencias, que las Humanidades desarrollan.

b) El Bachillerato de Humanidades fomenta la creación literaria, con la ampliación de la imaginación y la libertad de pensamiento. Al igual que con la oratoria, las Humanidades desarrollan la técnica retórica y argumentativa, que permite precisión lingüística y riqueza de matices. Forma escritores y personas que son capaces de expresar sus vivencias, ideas y necesidades por escrito, y, por tanto, que saben leer e interpretar textos, ya que nuestra vida es un conjunto de mensajes escritos (desde el whatsapp a las instrucciones de la lavadora, pasando por los clásicos de la literatura y el pensamiento)

c) El Bachillerato de Humanidades potencia capacidades cognitivas como el pensamiento divergente (generar ideas creativas mediante la exploración de muchas posibles soluciones). Las Humanidades (Letras) se caracterizan por la «Comprensión» (en alemán: «Verstehen»), por ejemplo en la Historia y en la Filosofía. Sirve para conocer el significado de las acciones, para establecer analogías entre experiencias propias y sucesos externos. «Comprender», «interpretar», «comprehender», «alcanzar», «inteligir», «aprehender», «entender», «percibir el significado», etc., se refieren, por tanto, a una operación intelectual compleja, que tiene en cuenta el aspecto cualitativo de los hechos. Mucho más compleja que la «explicación» (en alemán: «Erklären») propia de las Ciencias Naturales, que se limita a conocer las cosas como objetos externos usando la causalidad. Pero, ¿cómo vamos a comprender al ser humano y la sociedad reduciéndolo a cosa, como hacen las Ciencias Naturales y la Tecnología?

d) El Bachillerato Humanístico es el bachillerato de las Lenguas. Buena parte de las lenguas del mundo son flexivas, es decir: se declinan (con sufijos), como el griego y el latín. El aprendizaje de las lenguas clásicas da una estructura mental sintáctica, gramatical y léxica que permite aprender otras lenguas (alemán, ruso…) con más facilidad. Y esto es una ventaja en un mundo globalizado y multilingüe. De ahí la creciente demanda de traductores e intérpretes, y aquí, de nuevo, son los Bachilleratos de Humanidades los que preparan técnica y mentalmente para esta tarea hermenéutica: para traducir es necesario conocer el significado, la estructura y el contexto del hablante.
Es el bachillerato de las palabras. El dramaturgo Dario Fo escribió: «El obrero conoce 300 palabras; el patrón, 1000. Por eso es el patrón». El conocimiento del lenguaje es el conocimiento de la realidad, el arma del pensamiento y la liberación.
Además la Lingüística es fundamental para el desarrollo de la inteligencia artificial y de los lenguajes informáticos, lo que la hace un saber productivo y demandado. No solo de matemáticas vive el ser humano. Y olvidamos que las matemáticas se explican… ¡¡con palabras y reglas lógicas!!

Francisco Huertas Hernández & Inmaculada Arriero Doblado